Aislamientos preventivos (por Fernando G. Calero, Comunicación MSF)

MSF
04/11/2014

A estas horas debería estar volando hacia Monrovia (Liberia). Y sin embargo, todavía estoy en Bruselas. No me encuentro mal, pero sí estoy muy resfriado y me duele la cabeza. Es posible que también tenga unas décimas de fiebre. Estos síntomas tan comunes son los culpables de que siga aquí y, hoy, me toque descansar. “Si fueras a RCA o a Zimbabue no habría problema. Te habrías subido al avión y ya está, pero con esto del ébola tenemos que ser sumamente precavidos. Has hecho bien en decirnos que no estabas al 100%. Y yo, como responsable médica, no puedo permitir que te vayas hasta que estés del todo recuperado”, me decía mi compañera Cécile de Walque, referente de ébola de Médicos Sin Fronteras en Bruselas, esta mañana.

Su decisión tiene toda la lógica del mundo. Ayer, en la formación que recibimos todos los trabajadores humanitarios antes de partir hacia África occidental, no se cansaron de repetirlo una y otra vez: “Cuando estés allí, tu salud debe ser siempre lo primero. Vigílate y vigila a tus compañeros. Si no te encuentras bien, comunícalo inmediatamente. Si ves que un compañero no está bien o que está demasiado cansado y sigue trabajando, primero háblalo con él y pídele a su vez que también se lo diga al responsable médico. Si no lo hace, comunícalo inmediatamente. No toques a nadie, no corras riesgos innecesarios, mantente sano. Por ti y por todos los demás. No puedes permitirte poner en riesgo al resto del equipo”.

Así que, esta mañana, sin ni siquiera haber pisado terreno, ya me ha tocado aplicarme la regla: “Si ese pequeño catarro acaba convirtiéndose en una gripe, no solo no vas a poder trabajar, sino que vas a generar inquietud entre tus compañeros", me explicaba Cécile. "Y no te olvides de que, además, podrías contagiárselo. Aunque solo sea un resfriado, imagínate lo que supone para alguien que está sometido al estrés de enfrentarse al ébola el sentir síntomas similares, al menos inicialmente, al virus contra el que está luchando. Así que, lamentándolo mucho, te quedas por aquí hasta que veamos cómo evolucionas”.

 

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