Más de un millón de personas atendidas en crisis humanitarias en 2008 por MSF España gracias al apoyo de 446.000 donantes

La organización mejora su capacidad de respuesta inmediata desplegando en terreno equipos permanentes de emergencia y lidera la innovación médica en enfermedades olvidadas y desnutrición

MSF
15/07/2009

 

Más de un millón de personas atendidas en crisis humanitarias es el balance del trabajo de Médicos Sin Fronteras España en 23 países a lo largo de 2008, un año en el que además la organización humanitaria reforzó su capacidad de respuesta inmediata, estableciendo nuevos equipos permanentes de emergencia en regiones de alto riesgo. Asimismo, según recoge la “Memoria Nacional 2008 – Retos, dilemas, logros y fracasos de nuestra acción”, la organización médico-humanitaria lideró la innovación médica en el tratamiento de enfermedades olvidadas, como el Chagas, la malaria, el kala azar y la enfermedad del sueño, así como en la lucha contra la desnutrición infantil.

Según la Memoria, en 2008 la sección española de MSF prestó asistencia en África, Asia, Latinoamérica y Europa, realizando más de un millón de consultas médicas, con casi 59.000 hospitalizaciones. Un año más el grueso de las actividades se concentraron en la atención a víctimas de conflictos, la violencia y el desplazamiento forzoso, en países como Sudán, República Democrática del Congo (RDC), República Centroafricana (RCA), Chad, Territorios Palestinos o Colombia, entre otros. 

En algunos casos, como Somalia, Darfur o Sri Lanka, estas intervenciones se realizaron con dificultades debido a las inaceptables cotas de inseguridad, que forzaron la suspensión o a veces el cierre de las actividades, o a limitaciones impuestas por regímenes autoritarios, que obstaculizaron el acceso a poblaciones necesitadas de ayuda, como fue el caso de Zimbabue o, de nuevo, Darfur.

Los equipos de MSF respondieron a 18 emergencias, asistiendo a casi 460.000 personas, entre ellas las víctimas de los combates en la capital chadiana, Yamena; los desplazados por la violencia y el conflicto en el norte de RCA; las comunidades afectadas por las graves crisis nutricionales en el sur y el noreste de Etiopía, con casi 6.400 niños menores de 5 años atendidos en los centros nutricionales terapéuticos; o el brote de sarampión en Katanga (RDC), donde fueron vacunados 114.000 niños. Con el fin de reforzar esta capacidad de respuesta inmediata, en 2008 MSF decidió desplegar dos equipos permanentes de emergencias en zonas de alto riesgo, el este de África y el Caribe, el primero con sede en Nairobi y el segundo en Panamá. 

Estos equipos están preparados para realizar evaluaciones rápidas y dar la primera respuesta a las emergencias, en el momento de mayor urgencia. Así, en 2008, el Equipo de Emergencias de Nairobi (NET por sus siglas en inglés) llevó a cabo varias importantes intervenciones en la región, siendo el primero en intervenir en las crisis nutricionales en Etiopía, las epidemias de cólera en Zimbabue y Sur de Sudán, o la crisis de desplazamiento en los Kivus (este de RDC). En cuanto al equipo de Panamá, preposicionado en una región propensa a catástrofes naturales, realizó numerosas misiones de evaluación en países afectados por desastres, pero en ninguno de los casos fue necesaria su intervención.

Asimismo, MSF España siguió desarrollando nuevas estrategias en la lucha contra las enfermedades olvidadas, demostrando que esta es posible cuando existe voluntad. Así, se adoptaron nuevos tratamientos para pacientes de kala azar y enfermedad del sueño; se implantaron de forma masiva las terapias combinadas a base de artemisina contra la malaria (con unas 100.000 personas en tratamiento); y se apostó por tratar a enfermos de VIH/Sida en contextos precarios y conflictivos. En las emergencias nutricionales, estos nuevos enfoques permitieron tratar a 45.000 niños, gracias a la utilización de los alimentos terapéuticos listos para usar (RUTF), que, al reducir la cifra de pequeños que requieren hospitalización, posibilitan la generalización de la atención ambulatoria.

 

Además, MSF lideró la innovación médica con enfermos de Chagas desde el proyecto de Cochabamba (Bolivia), que incluye tres elementos innovadores: la integración del diagnóstico y tratamiento dentro de los centros de atención primaria; el tratamiento de adultos de entre 18 y 45 años de edad (que hasta ahora no se llevaba a cabo debido a los efectos secundarios que los fármacos provocan en las franjas de edad más avanzadas), y el tratamiento de pacientes con signos clínicos tempranos. En base a esta experiencia, MSF ha lanzado en 2009 una campaña internacional destinada a reclamar a los países endémicos una mayor atención para los pacientes de una enfermedad que mata a cerca de 14.000 personas al año y afecta a entre 10 y 15 millones más en Latinoamérica.

BALANCE FINANCIERO

En cuanto al balance financiero, el gasto de MSF España alcanzó en 2008 los 66,6 millones de euros (un 6,3% más que en 2007): la firme apuesta por la optimización de los recursos consiguió aumentar al 84,33% los gastos destinados a la misión social de la organización (ayuda humanitaria y testimonio) y reducir al 15,67% los de administración y captación de fondos (1). En cuanto a los ingresos, procedieron en un 89,83% de fuentes privadas (socios, donantes privados, empresas, herencias y fondos propios de MSF) y en un 10,17% de fuentes institucionales -esencialmente AECID y ECHO (2)-, situándose en total en los 71 millones de euros, un 20% más que en 2007. La Memoria destaca además que MSF España cerró 2008 con casi 446.000 socios y colaboradores, un aumento del 9,2% respecto al año anterior.

Según explica Paula Farias, Presidenta de MSF España, “el trabajo que recogemos en este informe no habría sido posible sin el respaldo continuado de nuestros socios y colaboradores, y el hecho de que este compromiso sea tan sólido incluso en momentos en los que la preocupación por la economía ha estado tan presente, demuestra que los donantes han asumido que su aportación es ahora más importante que nunca: si la crisis impacta aquí, también lo hace en los países en los que MSF presta su asistencia”. “Y a este reconocimiento y legitimidad que nuestra base social nos presta, MSF responde con rendición de cuentas y un uso responsable de los fondos”, añadió.

 

(1) Frente al 83,67% y 16,33% destinados a estas partidas, respectivamente, en 2007.
(2) Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo, y Oficina de Ayuda Humanitaria de la Comisión Europea.