MSF aumenta su ayuda médico-humanitaria en el sur de Kirguizistán

25 heridos y dos muertos en un hospital de Osh, el lunes 21 de junio

MSF
22/06/2010

La situación sigue siendo muy tensa en Osh y Jalal-Abad, al sur de Kirguizistán, donde los violentos enfrentamientos han acabado con la vida de cientos de personas desde el 10 de junio. Los equipos sanitarios de MSF en el terreno ofrecen asistencia médica a las víctimas y desplazados y proporcionan apoyo a las estructuras médicas locales.

Violencia en Nariman

El lunes 21 de junio, un equipo de la organización médica internacional Médicos Sin Fronteras (MSF) fue informado acerca de un nuevo episodio de violencia en Nariman, a las afueras de Osh. Así pues, varios trabajadores de MSF se desplazaron hasta el hospital de la localidad, donde había 25 heridos recibiendo asistencia sanitaria y dos personas ya habían fallecido.

Según las palabras de Andrei Slavuckij, coordinador de MSF en el sur de Kirguizistán « todos los pacientes eran hombres que presentaban lesiones en la cabeza, fracturas en las costillas y hematomas». «Estas heridas son el resultado de violentas palizas. Es un nuevo ejemplo que sirve para demostrar que la violencia y la tensión aún siguen presentes».

MSF donó medicamentos básicos y material médico, ya que el personal sanitario del hospital podía atender a los pacientes, pero no tenía recursos. Además, el equipo de la organización ha sido testigo de la presencia en el hospital de cuatro personas armadas sin identificar, una situación que puede impedir que otros heridos acudan en busca de asistencia médica.

Según afirma Slavuckij, «si hay otras personas heridas, pueden estar probablemente escondidas, temiendo venir al hospital en busca de asistencia médica.» «Además, algunas ambulancias no pueden llevar a los pacientes graves a las estructuras médicas más especializadas, ya que sus conductores han recibido amenazas de muerte. Es de vital importancia que los pacientes que necesiten asistencia sanitaria tengan un acceso libre y total a las estructuras médicas».

Inicio de  actividades en Onadir

El martes 22 de junio, un equipo de MSF se encontró con una situación muy complicada en una estructura sanitaria en Onadir, una comunidad uzbeca de 55.000 habitantes situada al sur de Osh. Según afirma Sonia Peyrassol, psicóloga y coordinadora del proyecto, «el personal médico está completamente exhausto». «Llevan tratando a los pacientes noche y día desde el primer momento que empezó la crisis». «Tanto los pacientes como el personal sanitario están sumidos en un profundo estado de conmoción; cuando les preguntamos cómo están rompen a llorar y nos cuentan historias terribles».

El mismo día, MSF proporcionó asistencia postoperatoria a 50 pacientes que habían resultado heridos en los primeros días del conflicto. Ahora, MSF está prestando apoyo a las clínicas con material y personal quirúrgico y reforzando la asistencia sanitaria en las áreas de maternidad y pediatría, y está administrando tratamientos para enfermedades crónicas. Un cirujano de MSF, un médico y una enfermera estarán de forma permanente en Onadir y trabajarán codo con codo con el personal del centro.

Más de diez días después de que se desataran los enfrentamientos entre comunidades al sur de Kirguizistán, la situación todavía es muy tensa, tanto en el interior como en las afueras de Osh y Jalal-Abad. Sin embargo, MSF ha observado que algunas personas que huyeron de la violencia (algunas cruzaron la frontera hacia Uzbekistán) han empezado ahora a regresar a sus lugares de origen. Se han incendiado muchas casas en Osh y en los alrededores y mucha gente todavía sigue aterrada y permanece escondida o atrincherada en los barrios. Los rumores no hacen más que agravar esta situación de pánico.

Seis equipos de MSF en el terreno

MSF está trabajando actualmente en Osh y Jalal-Abad, así como en cuatro zonas cerca de la frontera con Uzbekistán, proporcionando asistencia médica y proporcionando apoyo a los afectados y desplazados por la violencia existente.

MSF ha organizado seis equipos compuestos por médicos, cirujanos, enfermeras, psicólogos y personal de logística. Cuatro de los equipos se centran en la asistencia a las familias desplazadas por la violencia y que están viviendo en condiciones nefastas. Además de asistencia médica y psicológica, han repartido 1.000 kits de higiene y otros artículos de emergencia para 5.000 personas.

Otros dos equipos se encuentran en las estructuras sanitarias en las ciudades de Osh y Jalal-Abad, formando personal sanitario local y material médico. El miércoles 23 de junio, el personal de MSF realizó alrededor de 300 consultas médicas en un solo día, incluyendo la asistencia sanitaria a muchos heridos.

Actualmente, hay 25 miembros internacionales de MSF en el sur de Kirguizistán.

Al otro lado de la frontera en Uzbekistán, MSF se ha encargado de formar y orientar a los psicólogos locales con el fin de ofrecer apoyo psicológico a los refugiados, centrándose en sesiones de terapia de grupo y formando a los terapeutas. Se ha valorado las necesidades en cuanto a agua y saneamiento y se ha estado ayudando a los refugiados con provisiones de emergencia. Desde el 23 de junio, la situación está cambiando y el equipo de MSF ha visto como se marchaban muchos refugiados. Como consecuencia, las autoridades han detenido las actividades destinadas a la salud mental y el equipo en el terreno continúa supervisando la situación y preparándose para ofrecer asistencia a otros equipos de MSF en el lado de la frontera con Kirghizistán.