MSF combate un brote mortal de dengue en Honduras

El número de casos es tres veces mayor al del año pasado por estas fechas.

MSF
24/10/2013

Una epidemia de dengue hemorrágico, la variante más peligrosa de esta enfermedad, se está extendiendo en San Pedro Sula, la segunda ciudad más importante de Honduras. A día de hoy ya se han detectado más del triple de casos que el año pasado por estas mismas fechas, lo que ha elevado el nivel de alarma por encima del umbral de emergencia médica.

Los equipos de la organización médica internacional Médicos Sin Fronteras (MSF) han puesto en marcha una acción de respuesta coordinada junto a las autoridades sanitarias del país cuyo objetivo pasa por reducir la mortalidad entre los niños menores de 15 años, el grupo de población más vulnerable a contraer la enfermedad. Para ello, varios trabajadores de MSF trabajan desde hace dos meses en el hospital Mario Catarino Rivas, el principal centro público del noreste de Honduras, donde han creado una unidad de cuidados intensivos especialmente diseñada para atender los casos de dengue.

"La epidemia de dengue representa una gran amenaza para la población hondureña", explica el Doctor Luís Neira,  coordinador médico de MSF. "Desde que empezamos a trabajar aquí, hemos visto un flujo constante de pacientes. Nos estamos enfocando en la prestación de asistencia de emergencia para los niños menores de 15 años de edad, ya que tres de cada cuatro pacientes, incluyendo los casos más graves, son niños”.

En agosto de este año, el número de casos sospechosos de tener dengue hemorrágico subió un 235% respecto al mismo mes de 2012. Las autoridades locales de salud estaban completamente desbordadas y esto llevó a MSF a lanzar una respuesta de emergencia con la que tratar de controlar la situación.

Endémica en América Central, el dengue es una enfermedad viral transmitida por la picadura del mosquito Aedes aegypti que provoca síntomas similares a los de la gripe. Sin embargo, la forma relativamente leve de la enfermedad puede complicarse en dengue hemorrágico, que causa sangrados, shock irreversible y, en ocasiones, la muerte.

En Honduras, hay cuatro tipos de dengue. "Las cuatro cepas circulan", dice el Dr. Neira "con riesgos de infección especialmente altos durante la estación lluviosa, de mayo a noviembre, cuando el mosquito responsable de la difusión de la enfermedad prolifera".

No existe un tratamiento específico para la fiebre del dengue, pero el diagnóstico temprano y una atención adecuada reducen drásticamente la tasa de mortalidad. Sin embargo, conseguir diagnóstico y atención a tiempo puede ser un desafío, ya que el sistema de salud en Honduras se encuentra en un estado de crisis, con escasos suministros médicos y poco personal calificado. "El problema de nuestros pacientes es que se enfrentan a múltiples barreras en el acceso a un tratamiento oportuno y adecuado", explica el Dr. Neira.

Un equipo de MSF ha formado a personal médico en los centros de salud de la ciudad de San Pedro Sula para detectar tempranamente los casos de dengue y remitir a los pacientes al hospital sin demoras, a la vez que garantiza que todos los niños menores de 15 años puedan acceder a medicamentos y tratamiento, de manera gratuita, en el hospital público Mario Catarino Rivas. El equipo ha creado la unidad pediátrica de dengue en tres salas del hospital, con personal propio de la organización, que brinda apoyo y capacitación al personal de salud del hospital.

En los dos primeros meses de atención, el equipo de MSF ha tratado a más de 560 niños en el servicio de urgencias del hospital, una cuarta parte de ellos menores de cinco años.

"También hemos donado medicamentos y suministros médicos al hospital para el tratamiento de adultos afectados por el dengue", concluye el doctor Neira. “Mientras tanto, MSF continúa monitoreando el brote por si hubiera que aumentar nuestra respuesta de emergencia”.
 


Además de la respuesta de emergencia a la epidemia de dengue, MSF trabaja en la capital hondureña, Tegucigalpa, atendiendo las consecuencias médicas de la violencia en varios de los barrios más violentos de la ciudad. MSF ha estado trabajando en América Central hace más de 25 años, proporcionando respuesta médico humanitaria en desastres naturales, emergencias y otras crisis.