MSF recuerda al Gobierno español su compromiso en la lucha contra la desnutrición infantil

La incorporación de la alimentación terapéutica destinada a la primera infancia debe ser una prioridad en las políticas de la cooperación española

MSF
14/10/2008

Con motivo de la celebración del Día Mundial de la Alimentación el próximo jueves, Médicos Sin Fronteras (MSF) quiere recordar al Gobierno español el compromiso adquirido tras la pasada Cumbre de la FAO en Roma, cuando estableció la seguridad alimentaria de los niños menores de 5 años como una prioridad inmediata. Es hora de pasar de las palabras a los hechos e introducir la alimentación terapéutica en las estrategias de ayuda alimentaria, para adaptarlas a las necesidades específicas de la primera infancia. Cada día mueren en el mundo cerca de 10.000 niños por culpa de la desnutrición, una emergencia médica para la que existen soluciones eficaces que, con voluntad política, pueden salvar la vida de los 20 millones de niños que cada año sufren desnutrición aguda severa.

“Hemos conseguido importantes avances en el tratamiento de la desnutrición aguda severa y demostrado sobre el terreno que el objetivo es alcanzable, pero pedimos ayuda porque, a pesar de la evidencia, los principales países donantes, como España, siguen sin impulsar estrategias nutricionales orientadas a las necesidades específicas de los más pequeños. Se necesitan nuevas políticas públicas y apoyo financiero. Las ONG especializadas no podemos estar solas frente a una emergencia que afecta a 20 millones de niños”, explica Carlos Ugarte, Responsable de la Campaña contra la Desnutrición Infantil de MSF España.

La desnutrición aguda severa puede abordarse de forma efectiva con los alimentos terapéuticos listos para usar (RUTF, ‘ready-to-use therapeutic food’), una pasta alimenticia que contiene los 40 nutrientes esenciales que los niños necesitan. Con tasas de curación que superan el 90%, estos alimentos terapéuticos han permitido aumentar exponencialmente el número de niños que acceden al tratamiento, dado que se dispensan de forma ambulatoria, sin las limitaciones derivadas del número de camas en los centros médicos.

Entre los 6 y los 24 meses, periodo de rápido crecimiento y desarrollo, los niños necesitan alimentos altamente energéticos y ricos en nutrientes de origen animal. Sin embargo, los programas de ayuda alimentaria siguen suministrando mezclas de harinas enriquecidas exclusivamente de origen vegetal que no contienen los nutrientes indispensables: en efecto, en la actualidad, los RUTF sólo llegan un 3% de los niños que los necesitan.

En los programas nutricionales que MSF lleva a cabo en países como Níger, Uganda o Somalia, la organización es testigo del impacto positivo de los RUTF. A mediados de mayo, MSF puso en marcha una intervención nutricional de emergencia en Etiopía para paliar la fuerte crisis nutricional que asolaba varias regiones del país debido, entre otros factores, a la sequía y la dramática subida del precio de los alimentos. En cuatro meses, la organización ha tratado a 28.000 niños con desnutrición aguda severa.

Mientras se buscan soluciones globales a la crisis mundial de alimentos, debe actuarse con rapidez para atender a los niños que hoy están enfermos. La calidad de las ayudas alimentarias dirigidas a los niños en edad de crecimiento deben adaptarse a sus necesidades, tal y como vienen recomendando las propias agencias de Naciones Unidas, como el Programa Mundial de Alimentos (PMA), UNICEF y la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Si la seguridad alimentaria de los más pequeños es una prioridad del Gobierno Español, la definición del próximo Plan Director de la Cooperación Española 2009-2012, en fase de elaboración, supone una ocasión inmejorable para que ese compromiso se materialice en las estrategias sectoriales de Seguridad Alimentaria, Salud Pública y Acción Humanitaria, así como, en consecuencia, en todos los mecanismos de canalización de la Cooperación Española. “Un compromiso firme en esta línea puede salvar miles de vidas”, afirma Carlos Ugarte.

El pasado julio, MSF lanzó la Campaña contra la Desnutrición Infantil, con el objetivo de conseguir que la alimentación terapéutica se introduzca como forma generalizada de tratamiento de los niños con desnutrición aguda severa.
En España, MSF, UNICEF, Acción contra el Hambre y FRIDE trabajan conjuntamente para que la Cooperación Española introduzca estas estrategias en sus nuevas políticas de ayuda alimentaria.