Solo soluciones políticas concretas para limitar el cambio climático pueden prevenir sus consecuencias humanitarias. Las ONG respondemos a las crisis independientemente de la causa, pero nuestros esfuerzos no compensan las fallas políticas.
El desembarco parcial y selectivo, tal como se sugiere en el decreto del gobierno italiano, no puede considerarse lícito según las convenciones marítimas. “Estamos llegando a una situación insostenible. No se puede permitir que esto suceda".
Hoy, las necesidades ya superan la capacidad de respuesta: es una crisis de solidaridad, una crisis de moralidad. Hacemos un llamamiento a los líderes mundiales a que cumplan sus promesas de apoyo y de reducir sus emisiones de carbono.
Nos sumamos a Esenciales , una iniciativa plural liderada por personas migrantes con el objetivo de conseguir 500.000 firmas para solicitar en el Congreso de los Diputados la regulación administrativa de 500.000 personas migrantes en España.
La crisis climática no es una amenaza para el futuro; está muy presente e impacta en la salud y el bienestar de las personas en todo el mundo. Como organización, también tenemos la responsabilidad y compromiso de reducir nuestras emisiones.