Territorios palestinos: MSF rechaza ser un "paliativo social" en las políticas de la UE y EEUU

En la Franja de Gaza, aproximadamente la mitad de la población vive por debajo del umbral de la pobreza.

MSF
13/04/2006

Tras la victoria de Hamás en las elecciones legislativas de pasado enero, Canadá, EEUU y después la Unión Europea (UE) decidieron suspender su ayuda económica a la Autoridad Palestina. Sin embargo, han prometido continuar ayudando a la población a hacer frente a sus necesidades más básicas, prometiendo redistribuir parte de los fondos a las Naciones Unidas u otras organizaciones de ayuda internacional para que puedan compensar las consecuencias sociales y humanas de está sanción. Médicos Sin Fronteras considera está propuesta inaceptable.

MSF expresa su preocupación respecto al futuro socioeconómico de una población ya de por sí fuertemente castigada tras años de conflicto y ocupación. El riesgo de que se agrave su penuria es real, sobre todo en la Franja de Gaza, donde cerca de la mitad de los 1,4 millones de habitantes ya viven por debajo del umbral de la pobreza. Los bombardeos del ejército israelí son intensos (de 100 a 300 ataques al día desde el pasado viernes), con el balance de víctimas civiles que comporta. Además, el frecuente cierre de Karni, el principal punto de tránsito de mercancías, ha provocado la escasez de productos de primera necesidad.

Si son los gobiernos los que han decidido suspender la ayuda, los actores humanitarios no pueden ser “paliativos sociales” de medidas que afectan al conjunto de la población. Además, los actores de la ayuda humanitaria no tienen la competencia, ni los medios, ni la responsabilidad para sustituir a la Autoridad Palestina, en asegurar los servicios sociales, administrar los ministerios y el sistemas público y pagar el salario a los funcionarios. Tampoco es el papel de la agencias de ayuda humanitaria asegurarse de que las necesitadas básicas de la población civil que vive en los Territorios Ocupados estén cubiertas. Esta responsabilidad, según la cuarta Convención de Ginebra, corresponde a la fuerza ocupante, es decir, el estado de Israel.

La “instrumentalizacion” y la confusión de los roles y las responsabilidades hace peligrar la independencia de las ONG y puede, de hecho, ponerlas en peligro en un contexto ya de por sí inestable. El deterioro de las condiciones de seguridad, así como los recientes secuestros de personal internacional, ya nos han obligados a evacuar en varias ocasiones a nuestros equipos de los proyectos de Nablus, Hebrón y Gaza.

Temiendo una clara degradación de las condiciones de vida de la población, MSF ha decidido revisar y adaptar sus operaciones en los Territorios Palestinos. MSF reafirma –frente a cualquier Estado- sus independencia financiera y de acción. La organización espera que las autoridades palestina y los otros actores, tanto políticos como militares, garanticen la seguridad de los trabajadores de MSF, palestinos e internacionales, presentes en el terreno.

MSF trabaja en los Territorios palestinos desde 1989, respondiendo a las violentas consecuencias del conflicto. Desde 2000, nuestro trabajo se centra en dar apoyo psicosocial, además de tratamiento médico y apoyo social a las familias que sufren graves traumas y la falta del acceso a la salud. Hoy, nuestros equipos están trabajando en Nablus, Hebrón y Gaza.