“Fui a preparar un poco de té cuando nuestra casa fue bombardeada”

Son las palabras de un padre que nos cuenta en nuestro tren medicalizado en Ucrania cómo la guerra golpeó a su familia, en especial a su hija de 6 años. “Los médicos operaron a mi hija. Justo después de la anestesia, cuando se despertó, me dijo: 'Papi, no tengo piernas'. Sigue repitiéndolo una y otra vez: 'Papi, no tengo piernas”.

MSF
09/11/2022

Testimonio recogido en nuestro tren medicalizado el 15 de octubre de Dnipró a Leópolis (Lviv), en Ucrania:

En Ucrania, vemos a personas con heridas terribles. El 14 de octubre, nuestro tren medicalizado evacuó a un padre, una madre y su hija del oblast (región) de Dnipropetrovsk. La mujer presentaba heridas de metralla en brazos y piernas, y a su hija de 6 años le habían amputado ambas piernas. El padre de familia cuenta su historia:

“Nuestra familia es de Nikopol [en el sur de Ucrania]. Tenemos cinco hijos; dos de ellos se fueron a España hace algún tiempo. Mi esposa y mis otros tres hijos se fueron a Polonia hace tres meses y se quedaron en un albergue para refugiados. Me quedé en Nikopol para trabajar como decorador de casas. Mi esposa y mis tres hijos regresaron de Polonia a Nikopol el 5 de octubre para reunirse conmigo.

“Al día siguiente de que regresaron, estábamos en nuestra casa. Terminamos de cenar juntos y nos acostamos. Fui a preparar un poco de té cuando nuestra casa fue bombardeada. Salí arrastrado por la explosión, pero mi esposa y una de mis hijas estaban en la cama, más cerca del impacto.

 

El tren de evacuación médica de MSF transporta a las personas desde el este de Ucrania a hospitales más lejos de la línea del frente.

 

“Sufrí heridas leves: sentí dolor de espalda y dolor en los oídos. Dos de mis hijos resultaron ilesos, pero mi esposa y mi hija de 6 años resultaron heridas. Tres objetos verdes de aspecto afilado habían golpeado el suelo; uno de ellos explotó, pero los otros dos estaban intactos.

“Llamé a una ambulancia y vinieron con la brigada de defensa territorial”.

“Mi esposa se quedó en el hospital de Nikopol, mientras que yo fui con mi hija herida a Dnipró. Nuestros otros hijos que estaban con nosotros se fueron a vivir con sus abuelos fuera de Nikopol.

“Estuvimos en el hospital durante unos 10 días. Los médicos operaron a mi hija y explicaron que necesitaba más tratamiento en Leópolis (Lviv). Justo después de la anestesia, cuando se despertó, me dijo: 'Papi, no tengo piernas'. Ella sigue repitiéndolo una y otra vez: 'Papi, no tengo piernas'.

“Mi esposa se unió a nosotros ayer. Llora mucho y se preocupa por nuestra hija. Ahora los tres estamos en el tren de MSF que va a Leópolis (Lviv)”.