Violencia en Kivu Norte: serias dificultades para asistir a la población
El ultimo brote de violencia, que empezó a finales de agosto y continúa en septiembre, está provocando desplazamientos masivos de población y dificultando el acceso de la ayuda humanitaria
La provincia del Kivu Norte, en la República Democrática del Congo (RDC), es una área donde la intensidad de violencia crónica puede aumentar bruscamente. Debido a la reciente inseguridad en el Kivu Norte – con enfrentamientos así como saqueos y ataques en las carreteras– proporcionar asistencia a la población es muy difícil para MSF, si no imposible.
En dos áreas –Nyanzale y Mweso– se identificó una epidemia de sarampión en julio, que requería una intervención de emergencia. En Nyanzale, los equipos de MSF ha tratado a 411 niños con sarampión desde principios de julio y se han registrado 13 muertes. En Mweso, MSF trató a 312 niños y cinco de ellos fallecieron. El sarampión es una de las principales causas de muerte en los países en desarrollo y puede ser fácilmente prevenible mediante vacunación. Sin embargo, la campaña de vacunación que MSF planeó llevar a cabo para 70.000 niños en esa área tuvo que posponerse por la inseguridad. De igual forma, sigue siendo imposible llevar a cabo la campaña de vacunación en Mweso.
Los últimos enfrentamientos han provocado desplazamientos masivos de población. En el área de Mweso, en la zona de Masisi, MSF ha apoyado desde febrero cuatro clínicas y ofrecer asistencia sanitaria a decenas de miles de desplazados internos y residentes. MSF ha hecho 40.000 consultas (incluyendo 17.000 pacientes de malaria y 440 niños desnutridos) a desplazados y residentes en el área. Pero con los enfrentamientos de finales de agosto, mucha gente huyó. Actualmente, el pueblo de Mweso y los campos de los alrededores están casi abandonados. MSF está muy preocupada por la situación de estas poblaciones que ahora no tienen asistencia.
Al sur de la ciudad de Masisi, se estima que otros 30.000 desplazados internos han estado viviendo en los últimos meses en un área muy insegura a la que MSF no tiene acceso. En el hospital de la ciudad de Masisi donde MSF empezó a trabajar el 30 de agosto, el equipo médico ha tratado a 51 heridos de guerra durantes los primeros días. Actualmente, el hospital con capacidad para 120 camas, está lleno.
Por último, la agresión sexual es otra forma de violencia a la que están expuestos los civiles. MSF trata a víctimas de la violencia sexual en Rutshuru, Nyanzale, Kayna y Mweso. Cada mes, nuestro equipos tratan a una media de 250 víctimas de violaciones entre estas cuatro localizaciones. Pero este número ha incrementado bruscamente durante el último pico de violencia. En las primeras dos semanas de septiembre, los equipos de MSF trataron 260 nuevos casos de violencia sexual.
La situación sigue siendo muy volátil y preocupante en la provincia. MSF continúa intentando proporcionar asistencia a la poblaciones afectadas en el Kivu Norte.