MSF muestra en el informe ‘Carrera de obstáculos a Europa’ que las políticas europeas han agravado la crisis de refugiados

Médicos Sin Fronteras (MSF) denuncia en su informe publicado hoy, ‘Carrera de obstáculos a Europa’, el fracaso de la Unión Europea (UE) en 2015 en la respuesta a las necesidades humanitarias de refugiados, solicitantes de asilo y migrantes.

MSF
19/01/2016

"La UE y los gobiernos europeos no solo han fallado colectivamente a la hora de abordar la crisis; el hecho de poner el foco en las políticas de disuasión sumado a su caótica respuesta a las necesidades humanitarias de quienes huyen, empeoraron en 2015 las condiciones de miles de hombres, mujeres y niños vulnerables ", afirma Paula Farias, responsable de Operaciones en el Mediterráneo de MSF.

El informe ‘Carrera de obstáculos a Europa’, elaborado a través de los testimonios de personal y pacientes de MSF así como de los datos médicos recogidos en el transcurso del año pasado, detalla las consecuencias humanitarias de las políticas europeas. Además, el documento muestra que los muros, administrativos y físicos, levantados por los países europeos y la UE han obligado a MSF y a otras organizaciones humanitarias a ampliar de forma drástica sus actividades en los puntos de entrada al continente. Nunca antes MSF había tenido en marcha tantos programas médico-humanitarios y tal número de personal desplegado en Europa; nunca en la historia de la organización, MSF había movilizado barcos para llevar a cabo operaciones de búsqueda y rescate en el mar.

"El hecho de que las personas traten de buscar seguridad y una vida mejor en Europa no se trata de un fenómeno nuevo", añade Farias. "Al contrario, es una realidad con la que nos hemos ido familiarizando durante muchos años. Sin embargo, a principios de 2015, decidimos que no podíamos asistir impasibles desde la orilla a como el Mediterráneo se convertía en una fosa común. En 2016, los estados europeos deben hacer balance del coste humano de sus decisiones, asumir sus responsabilidades y aprender de sus errores”.

El informe describe los obstáculos que la UE y sus estados miembro han situado en el camino de más de un millón de personas, la mayoría de las cuales huyen de la guerra y la persecución. Europa he hecho un trabajo atroz. Las políticas europeas han incluido desde la ausencia de toda alternativa a una travesía mortal, al levantamiento de vallas y alambradas de alambre de espino pasando por el continuo cambio de los procedimientos de registro, la comisión de actos violentos en el mar y en las fronteras terrestres y la proporción de unas condiciones de acogida en Italia y Grecia totalmente inadecuadas.

Tras haber realizado más de 100.000 consultas médicas y de salud mental, MSF ha recopilado una visión dramática y representativa del impacto que estas trabas tienen en la salud física y mental de las personas.

"Estamos en el comienzo de un nuevo año en el que, a ciencia cierta, la gente seguirá arriesgando sus vidas y en el que ninguna política restrictiva hará que dejen de buscar un futuro mejor para ellos y sus familias. Por este motivo, seguimos pidiendo vías seguras para ellas e instamos a Europa a que deje de jugar con las vidas y la dignidad de estas personas ", recalca Aurelie Ponthieu, asesora humanitaria sobre Desplazamiento de MSF.

"Esta crisis está lejos de terminar y la ayuda siguen siendo completamente insuficiente en Italia, Grecia y los Balcanes", continúa Ponthieu. "Durante 2015, los Estados europeos han tratado de encontrar políticas que protegieran sus fronteras de personas que llegaban a ellas en situación de extrema vulnerabilidad. Esperamos que en 2016 no haya necesidad de proteger a estas personas de las políticas europeas".