"Debemos reducir la duración de los tratamientos contra la tuberculosis”

Tetyana Pylypenko es de Ucrania y lleva más de diez años trabajando con MSF dentro y fuera de su país. En estos momentos es la responsable del programa de pacientes de tuberculosis (TB) llevado a cabo por MSF en la república autónoma de Karakalpakistán, en el noroeste de Uzbekistán.

MSF
14/08/2015

 

¿Cuándo comenzó MSF a trabajar en Nukus? 

MSF ha estado trabajando con pacientes de TB en Karakalpakistán desde 1998. Junto con el Ministerio de Salud, pusimos en marcha un programa de diagnóstico y tratamiento de TB sensible a los fármacos. A lo largo de los años, el proyecto ha evolucionado hasta incluir niños y pacientes con formas de la enfermedad resistentes a los medicamentos (DR-TB por sus siglas en inglés). En la actualidad, todos los enfermos de tuberculosis de la república tienen acceso al diagnóstico y tratamiento. Hoy en día hay cerca de 2.000 personas en tratamiento; todos los pacientes registrados en el programa reciben los medicamentos para la tuberculosis de manera gratuita.

¿Cuáles son los retos de trabajar en Nukus?

Hay muchos retos, pero el principal es que los pacientes no siempre completan su tratamiento. Esto es especialmente habitual para quienes padecen formas de la enfermedad resistentes a los medicamentos; para éstos el régimen es largo y arduo y uno de cada cuatro interrumpe el tratamiento antes de que se haya completado.

MSF está tratando de mejorar la adherencia de los pacientes y ha creado un equipo de consejeros que ofrece información sobre salud y apoyo psicosocial a estos pacientes. También facilitamos incentivos a los enfermos como paquetes de alimentos. Desafortunadamente, hasta el momento no ha disminuido el número de pacientes que abandonan el régimen de tratamiento.

La única manera de mejorar realmente la adherencia es acortar la duración del tratamiento, disminuir el número de medicamentos implicados y asegurar que los fármacos puedan ser tomados oralmente, sin inyecciones, en el régimen. En 2013, MSF y el Ministerio de Salud comenzaron un estudio con un régimen reducido de nueve meses en vez de dos años que era el habitual. En este programa están inscritos 146 pacientes y los resultados, todavía preliminares, han sido positivos. Para los resultados definitivos tendremos que esperar a 2016.    

 ¿Cuáles han sido algunos de los logros recientes del programa de TB?

Uno de los grandes cambios en los últimos años es que los pacientes ya no tienen que permanecer hospitalizados durante tres meses para recibir tratamiento. Ahora pueden ser tratados como pacientes ambulatorios en su propio hogar, con sus familias. Los métodos de prueba también han evolucionado y con el equipo de diagnosis Gene Xpert, que realiza pruebas para detectar la presencia de la tuberculosis en el esputo, los resultados están disponibles en varias horas cuando antes esto nos llevaba varios días o incluso semanas. Esto se traduce en que el tratamiento eficaz puede comenzar tan pronto como sea posible. 

En junio de 2015, MSF fue la primera organización que introdujo en el país un nuevo medicamento llamado bedaquiline para tratar a los pacientes con tuberculosis extremadamente resistente a los fármacos. El bedaquiline debería aumentar sus posibilidades de curación.

¿Cuáles son los objetivos de MSF en la lucha contra la tuberculosis en la región?

El principal es implementar planes de tratamiento más breves que impliquen menos medicamentos y efectos secundarios, con mejores resultados para pacientes con DR-TB. Por otra parte, a menudo los niños son olvidados por los programas de TB así que en MSF también estamos participando en mejorar su diagnóstico y tratamiento. En un par de meses vamos a comenzar con la llamada composición de medicamentos, que no es otra cosa que la combinación de medicamentos para crear una formula específica adaptada a las necesidades de los niños y más fácil de ingerir por vía oral.   

¿Cuál ha sido el aspecto más gratificante de tu misión?

En los cuatro años que he trabajado en el programa de TB lo he visto evolucionar. El cambio ha sido posible gracias al trabajo conjunto de MSF y el Ministerio de Salud. Recuerdo una época en que las personas se mudaban a áreas de Karakalpakistán donde MSF estaba trabajando para poder obtener tratamiento contra la tuberculosis. Sin embargo, dado que no podían estar lejos de sus familias durante mucho tiempo y muchos no lo completaron. Otros pacientes fallecían porque no contaban con opciones de tratamiento. Ahora, todos los pacientes con TB tienen acceso al tratamiento en los lugares donde viven.

El proyecto cuenta con un gran equipo compuesto por personal nacional con experiencia y que está muy motivado. Ha sido un placer ser parte de un equipo tan profesional.

¿Qué consejo le darías a las personas que padecen TB?

Si padeces TB, recibir tratamiento no sólo podría salvarte la vida sino evitaría que contagiaras la enfermedad a tus amigos y seres queridos. Hay medicamentos disponibles contra la tuberculosis: la tuberculosis es curable.

Si tienes TB sensible a los medicamentos, el tratamiento dura seis meses y los efectos secundarios son poco habituales. El tratamiento contra la tuberculosis resistente a los medicamentos es de mayor duración (cerca de dos años) y produce más efectos secundarios, pero incluso éstos son manejables. Sé que el tratamiento es difícil y que puede ser difícil no abandonarlo, pero el resultado final vale la pena.

Si alguien cree que puede tener síntomas de tuberculosis debe consultar a un médico lo antes posible. Y, sobre todo, nunca debe rendirse.