Día Mundial del Sida: el reto de tratar el sida en zonas de conflicto

por Cecilia Ferreyra, médica especialista de VIH/Sida en Médicos Sin Fronteras.

MSF
03/02/2016

Las noticias positivas en torno al VIH/sida se acumulan: el número de personas VIH-positivas que reciben tratamiento ha aumentado drásticamente en los últimos años. La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda, desde el pasado julio, diagnosticar y tratar a todo el mundo independientemente de su estado inmunológico; incluso podemos oír voces que por primera vez se atreven a hablar del fin de la epidemia. Lamentablemente, la realidad es completamente distinta en República Democrática de Congo, República Centroafricana o Sudán del Sur, tres países golpeados por conflictos recurrentes que destruyen lo poco que existe. Son contextos donde la prevalencia de VIH va en aumento, solo un puñado de pacientes reciben tratamiento antirretroviral (ARV) y la comunidad internacional mira para otro lado. Contextos que nos obligan a desplegar nuestra imaginación para intentar llegar lo más cerca posible de los pacientes.

En Sudán del Sur, la prevalencia de VIH oscila entre el 2 al 11%, sin embargo, solo el 9% de las personas VIH-positivas que necesitan tratamiento urgentemente lo reciben; y aquí hablamos de las antiguas directrices de la OMS, ahora ya derogadas por la nueva recomendación de tratar a todas las personas diagnosticas desde el primer momento. Otro dato: solo un 10% de las mujeres embarazas con VIH tienen acceso a programas de prevención de la transmisión del virus de madre a hijo. Todo esto en un país azotado por una cruenta guerra que está a punto de cumplir su segundo aniversario. 

Yambio, un distrito situado en el suroeste de Sudán del Sur, cuenta con una de las prevalencias más altas del país (8%) y los servicios de VIH están centralizados en el hospital de referencia, así que la gente que vive fuera de la ciudad tiene que caminar un día entero o más para poder recibir atención. En julio de este año y antes de que la OMS recomendara tratamiento para todos, nos propusimos hacerlo en Yambio —diagnosticar y tratar de inmediato—, queríamos crear un modelo que fuera replicable en otros sitios también afectados por el conflicto y con poco acceso a antirretrovirales. El objetivo era acercar todo lo posible el tratamiento al paciente.

 

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