Los niños sin vacunar de Yida (por J.A. Bastos, presidente de MSF)

En este blog, ya he hablado anteriormente de la crisis de las vacunas, y de las razones por las que no llegan a millones de niños en los países pobres. Hoy miércoles, la Alianza Global para la Vacunación y la Inmunización (GAVI) se reúne en Estocolmo, así que me gustaría abordar de nuevo esta cuestión, que en Médicos Sin Fronteras nos parece gravísima y tan urgente de resolver.
En 2012, uno de cada 5 niños nacidos se quedaron sin recibir el paquete básico de vacunas: unos 22 millones de niños. Una enormidad. Permítanme que traduzca esta cifra a algo cercano: es como si no hubiéramos vacunado a ni uno solo de los niños nacidos en España en los últimos 35 años. Y lo que es incluso más alarmante es que esta cifra va en aumento, así que está claro que algo no funciona bien en el sistema mundial de inmunización.
Es cierto que se han producido avances significativos: la misma creación de GAVI, en 2002, es uno de ellos. Pero los vacíos siguen siendo enormes, y esto lo demuestra el trabajo de los equipos de MSF en el terreno, por lo que hacen, y por lo que les cuesta hacerlo. Me refiero a que si MSF tiene que intervenir en República Democrática del Congo para vacunar a más de 4 millones de personas sólo en 2010, es porque algo falla. Y si inmunizar a los niños del campo de Yida, en Sudán del Sur, con la nueva vacuna neumocócica, en plena emergencia, nos cuesta 11 meses de peleas burocráticas…. de nuevo, es que algo falla.