Ningún lugar está a salvo de los violentos combates en El Fasher, en Sudán

Los hospitales son golpeados repetidamente y el número de muertos se dispara mientras los violentos combates asolan El Fasher, en Sudán, sin dejar ningún lugar seguro en la ciudad. Hacemos un llamamiento urgente para la protección de civiles, el personal sanitario y los centros de salud.

MSF
28/05/2024
El Fasher - Julio de 2023

Los intensos e incesantes combates en El Fasher no dejan ningún lugar seguro para la población civil en la ciudad, y los pacientes y el personal médico se están convirtiendo cada vez más en parte del asombroso número de víctimas civiles.

Después de que el Hospital del Sur -que apoyamos- fuera atacado dos veces en los últimos días, las tres principales instalaciones médicas de la ciudad han resultado dañadas, mientras las Fuerzas Armadas Sudanesas y las Fuerzas de Apoyo Rápido se enfrentan en la capital de Darfur Norte. Solo dos de estas instalaciones siguen funcionando.

Vemos un baño de sangre masivo desarrollándose ante nuestros propios ojos en El Fasher. La intensidad de los combates no da tregua a la población civil y ahora los hospitales se ven cada vez más envueltos en los enfrentamientos, lo que dificulta cada vez más el tratamiento de los heridos", afirma Claire Nicolet, responsable de nuestro programa en Sudán. “Las instalaciones médicas deben ser protegidas y las partes beligerantes deben respetar su papel neutral como santuarios para enfermos y heridos donde la gente puede recibir asistencia médica de forma segura”.

El Hospital Sur de El Fasher fue alcanzado por primera vez el 25 de mayo, cuando un mortero cayó sobre la unidad de atención prenatal, matando a una persona e hiriendo a ocho pacientes y sus familias. Al día siguiente, un proyectil cayó dentro del hospital e hirió a otras tres personas, mientras que los fragmentos de la explosión rompieron las ventanas de la sala de partos y de la ambulancia. Otros tres proyectiles cayeron fuera del hospital.

“El Hospital del Sur está muy congestionado: es el único capaz de tratar las llegadas masivas de heridos y ha recibido a más de 1.000 pacientes desde que empezaron los combates en la ciudad el 10 de mayo.  Lamentablemente, 145 de ellos se encontraban en estado crítico y murieron a causa de sus heridas. Ahora el hospital se encuentra en primera línea, con un riesgo significativo de quedar fuera de servicio", afirma Abdifatah Yusuf Ibrahim, coordinador de nuestros proyectos.

Los niños y las niñas de El Fasher ya perdieron el acceso a tratamiento especializado cuando una bomba cayó cerca del único hospital pediátrico de la ciudad el 11 de mayo, matando a dos niños que estaban en la unidad de cuidados intensivos y dañando las instalaciones. El hospital de maternidad saudí fue alcanzado el 19 de mayo.

“Las instalaciones sanitarias deben seguir siendo seguras para los pacientes y el personal, que trabajan bajo una intensa presión para tratar a quienes tienen una necesidad crítica de atención médica. Instamos a las partes en conflicto en Sudán a que preserven las instalaciones médicas y respeten su neutralidad, y a que cumplan con su obligación de proteger a la población civil, al personal sanitario y a las estructuras sanitarias", afirma Claire Nicolet.

Uno de nuestros compañeros murió el 25 de mayo cuando un bombardeo alcanzó su casa, situada cerca del mercado principal de la ciudad, en otra demostración de que ningún lugar de El Fasher se libra de la violencia de este conflicto.