"Si no conseguimos introducir suministros en Gaza pronto, es posible que debamos detener algunas actividades médicas"

Nuestros equipos en Gaza se enfrentan a una escasez crítica de medicamentos y equipos esenciales, ya que desde finales de abril no hemos podido llevar ningún tipo de suministros médicos a Gaza. El cierre del paso fronterizo de Rafah, tras la ofensiva israelí en el sur de Gaza a principios de mayo, unido a la interminable burocracia impuesta por las autoridades israelíes, han congestionado drásticamente el flujo de ayuda humanitaria a través del punto de entrada de Kerem Shalom.

 

Esto ha provocado colas masivas de camiones y retrasos peligrosos en la entrega de ayuda humanitaria en toda Gaza. Además, incluso cuando la ayuda puede finalmente entrar en la Franja, la inseguridad no permite a menudo a las organizaciones humanitarias hacerla llegar allí donde se necesita desesperadamente.

 

A pesar de que las necesidades médicas se han disparado en toda la Franja, sin una reposición significativa de suministros médicos en los próximos días, MSF podríamos tener que detener o reducir drásticamente algunas de nuestras actividades médicas en Gaza.

 

"Nuestros suministros médicos están críticamente bajos debido al limitado flujo de ayuda que las autoridades israelíes están permitiendo entrar en Gaza. Si no conseguimos introducir suministros médicos en Gaza muy pronto, es posible que tengamos que detener nuestras actividades médicas. Se trata de una realidad impensable dadas las desesperadas necesidades médicas de miles de personas en Gaza.

Tenemos pacientes con quemaduras graves, fracturas abiertas, y ni siquiera tenemos suficientes analgésicos para aliviar su sufrimiento. En los hospitales Nasser y Al Aqsa, nuestros equipos han tenido que reducir la frecuencia de los cambios de apósito de los pacientes con quemaduras graves debido a la falta de gasas compresivas estériles, lo que podría provocar más heridas infectadas.

 

Con el 75% de los gazatíes desplazados y obligados a vivir en pésimas condiciones, los equipos de MSF hemos visto un aumento de pacientes con enfermedades de la piel, como la sarna, durante el último mes, mientras que nuestras reservas de medicamentos para tratarlas se están agotando peligrosamente. En Khan Younis, no pudimos atender consultas de medicina general durante varios días en nuestro recién inaugurado centro de salud de Al Attar, debido a la falta de suministros y medicamentos para llevar a cabo las actividades.

 

Mientras tanto, tenemos seis camiones, llenos de 37 toneladas de suministros, la gran mayoría de los cuales son artículos médicos esenciales, que llevan esperando desde el 14 de junio en el lado egipcio del paso fronterizo de Kerem Shalom, sin poder cruzar a Gaza, donde se necesitan para salvar vidas. Sin embargo, están bloqueados junto a otros 1.200 camiones que esperan para entrar en la Franja. Esto es incomprensible e inaceptable; es como pedirle a un bombero que vea arder una casa llena de gente e impedirle que apague el fuego.

 

Las autoridades israelíes deben abrir urgentemente más pasos fronterizos para descongestionar Kerem Shalom y acelerar masivamente la cantidad de ayuda que llega diariamente a Gaza. También pedimos a todas las partes que garanticen rutas seguras para trasladar la ayuda humanitaria al interior de la Franja. Solo así evitaremos más muertes evitables".

 

Guillemette Thomas, coordinadora médica de MSF en Palestina