Somalia: trágica muerte en el ataque contra un vehículo de MSF
MSF pide a todas las partes en conflicto que respeten el trabajo de las organizaciones humanitarias

Durante la noche del pasado miércoles 24 de junio, un vehículo que había sido alquilado por Médicos Sin Fronteras (MSF) fue atacado en Galcayo Norte cuando volvía de trasladar a un paciente al hospital.
La cuidadora que estaba encargada de acompañar al paciente murió en el ataque y el conductor del vehículo resultó herido. El tercer pasajero, un empleado de MSF, no sufrió heridas en el atentado. El conductor está recibiendo tratamiento para sus heridas desde entonces y afortunadamente ahora está en buenas condiciones. El coche fue robado tras este incidente.
Aunque parece que este ataque no estaba expresamente dirigido contra MSF, la violencia contra aquellos que siguen proporcionando una asistencia médica que es crucial en Somalia es absolutamente inaceptable. Este tipo de acciones ponen en peligro el trabajo de organizaciones humanitarias, cuya única finalidad es la de salvar vidas y proporcionar asistencia médica a cientos de miles de somalíes en todo el país.
MSF trabaja en Somalia desde 1991. Desde enero de 2008, los proyectos del MSF en el Sur de Somalia y en Somalia Central siguen en marcha gracias al compromiso, el trabajo y la valentía de nuestro personal somalí, apoyado por un equipo de MSF basado en Nairobi que visita los proyectos siempre que la seguridad lo permite.
MSF hace un llamamiento a todas las partes enfrentadas en el conflicto para que se respeten las estructuras y actividades médicas y para que todo el mundo, independientemente de sus afinidades políticas, religiosas o militares, pueda tener acceso a la asistencia médica que necesita.
Sólo a lo largo de 2008, los equipos de MSF llevaron a cabo 727.428 consultas médicas, incluyendo 267.168 a pacientes menores de cinco años. Más de 55.000 mujeres recibieron cuidados prenatales y más de 24.000 personas fueron ingresadas en las distintas instalaciones médicas en las que trabaja el personal de la organización. Se llevaron a cabo 3.878 intervenciones quirúrgicas, de las cuales 1.249 fueron a causa de heridas provocadas por la violencia. Los equipos médicos trataron a 1.036 personas afectadas por una enfermedad olvidada como es el kala azar, dieron cuidados a más de 4.000 enfermos de malaria y dieron tratamiento contra la tuberculosis a 1.556 personas. Además, se suministró comida y cuidados médicos a alrededor de 35.000 personas que sufrían desnutrición y se vacunó a más de 82.000 personas. |