Terremoto en Indonesia: MSF centra su trabajo en la atención postoperatoria

La intervención de MSF complementó la rápida respuesta local a la emergencia y se centró en cirugía, cuidados postoperatorios y fisioterapia.

MSF
04/07/2006

Kabul, un hombre de 82 años, estaba barriendo su casa en Bantul cuando el suelo empezó a temblar y el techo se desplomó. Se precipitó hacia la puerta pero antes de poder llegar al patio una pesada viga cayó sobre su pierna, tirándolo al suelo. “Estaba aterrorizado”, recuerda. “Me quedé en blanco y sólo podía pensar en el insoportable dolor que tenía”. La mayoría de las casas en Bantul están construidas con materiales ligeros por lo que gran parte de las víctimas pudieron ser rescatadas de debajo de los escombros al cabo de pocas horas. Sin embargo, se produjeron muchas fracturas de huesos.

El terremoto que golpeó la isla del Yogyakarta el sábado 26 de mayo de este año acabó con la vida de 5.760 y 37.339 resultaron heridas según las últimas estadísticas oficiales. Los equipos locales de emergencia respondieron rápidamente y llevaron a cabo aproximadamente 5.000 operaciones y trataron a los heridos más graves en los primeros días después del seísmo. Sin embargo, los hospitales estaban colapsados por el enorme número de pacientes, lo que dificultó la atención postoperatoria necesaria para la rehabilitación de los pacientes.

Cirugía y cuidados postoperatorios
MSF llegó a la conclusión de que su apoyo a los mecanismos de respuesta a la emergencia existentes sería más efectivo si se centraba en las necesidades quirúrgicas y la atención postoperatoria. Durante dos semanas, un cirujano ortopédico con un equipo quirúrgico de cinco personas realizó una media de cinco operaciones diarias en uno de los hospitales de Yogyakarta. De esta manera, el equipo de MSF, junto a otros equipos quirúrgicos internacionales y nacionales, pudo atender a los pacientes que no pudieron ser operados inmediatamente después de terremoto debido a la gran afluencia de heridos.

Kabul fue uno de estos pacientes, y como él, muchos necesitan seguir hospitalizados durante días o semanas para recuperarse totalmente de la operación. Sin embargo, en los primeros días después del seísmo muchos de los pacientes recibieron el alta antes de lo que sería recomendable en circunstancias normales, ya que los hospitales estaban sobrecargados, y ahora corren el riesgo de sufrir infecciones o complicaciones.

Para resolver este problema MSF construyó un hospital de campaña en Yogyakarta para poder ofrecer cuidados postoperatorios. Aproximadamente 100 pacientes que requerían atención postoperatoria y hospitalización han sido trasladados desde los principales hospitales de Yogyakarta, sobre todo del hospital de Sardjito, al hospital de campaña que instaló MSF. Los equipos de MSF e indonesios proporcionan seguimiento médico, así como fisioterapia para la recuperación de las lesiones y consultas psicológicas. El hospital es una estructura temporal que consiste en una serie de tiendas interconectadas totalmente equipadas con electricidad, agua corriente, letrinas y farmacia. Una vez que los pacientes se recuperan, se les dan artículos básicos de ayuda para cuando regresen a sus hogares, y entonces nuevos pacientes son trasladados desde el hospital.

Respondiendo a necesidades específicas
Otra prioridad para los equipos de MSF es encontrar a los pacientes a los que se les dio el alta demasiado rápido de los hospitales y regresaron a sus aldeas en los primeros días después del terremoto. El sistema sanitario indonesio ha organizado 14 clínicas móviles para recorrer las aldeas más afectadas y identificar a los pacientes que necesidades cuidados adicionales. Conjuntamente con las autoridades sanitarias, los equipos médicos de MSF realizan visitas a domicilio en los pueblos más afectados, y en los últimos días han registrado 70 nuevos pacientes que necesitan fisioterapia. Los equipos también han visto a otras 20 personas que necesitan cirugía adicional. Los que necesitan de nuevo hospitalización son referidos al hospital de campaña de MSF y los que necesitan cirugía son trasladados al hospital de Sardjito.

Para complementar esta estrategia, MSF acaba de abrir dos puestos de salud en el área de Bantul, de donde proceden la mayoría de los heridos. De esta manera, las personas que no necesitan hospitalización pueden ir a los puestos de salud para cambiar las vendas o yesos, hacer fisioterapia y realizar las revisiones médicas.

“Debido a la increíble respuesta local MSF no ha tenido que movilizarse a gran escala”, concluye la coordinadora de emergencia de MSF Fabrice Resongles. “Pero había lagunas que llenar. El apoyo hospitalario en particular se identificó claramente como una necesidad concreta a través de la cual hemos podido contribuir en algo a ayudar a los pacientes a recobrar lo más parecido a una vida normal de la forma más rápida posible”.