En 2022, Médicos Sin Fronteras proporcionamos atención médica a los migrantes que cruzaban el Tapón del Darién, una zona remota de selva en la frontera entre Colombia y Panamá.

  • 43.100 consultas externas
  • 2.600 consultas individuales de salud mental
  • 180 personas atendidas por haber sufrido violencia sexual
  • Mapa de proyectos de MSF en Panamá en 2022

La cantidad de personas migrantes que atravesaron el Tapón del Darién a lo largo del año aumentó drásticamente y se registró que casi un cuarto de millón de personas cruzó la frontera. Aunque en 2022 intentamos obtener permiso para trabajar en los puntos de llegada del lado panameño de la frontera, a nuestros equipos solo se les permitió ayudar a las personas en los centros de recepción de personas migrantes de San Vicente y Lajas Blancas, donde las autoridades trasladaron a los migrantes que cruzaron el Tapón del Darién. Este retraso puede ser problemático, especialmente en casos de violencia sexual, ya que es fundamental que los pacientes reciban atención médica lo antes posible para garantizar un tratamiento de emergencia adecuado.

La gran mayoría de las personas que cruzaron el Tapón del Darién en 2022 eran personas venezolanas que decidieron abandonar otros países de América Latina donde se habían establecido y trasladarse al norte, México y Estados Unidos, con la esperanza de encontrar seguridad y mejores oportunidades. Muchas personas hicieron el peligroso viaje con sus familias, incluidos parientes de edad avanzada, niños y niñas pequeños y mujeres embarazadas.

Cruzar la selva del Darién puede llevar hasta 10 días y es extremadamente peligroso. El terreno es peligroso, ya que hay acantilados escarpados y los ríos pueden inundarse sin aviso. Escuchamos muchos relatos de personas que murieron ahogadas o por una caída. Las personas migrantes también son vulnerables a los ataques de pandillas que las emboscan en la selva.

  • Los migrantes llegan a Bajo Chiquito luego de tomar una piragua a una hora de distancia en un punto conocido como Come Gallina.

Nuestros equipos trabajaron con el Ministerio de Sanidad para proporcionar atención médica y apoyo de salud mental a las numerosas supervivientes de violencia y violencia sexual, incluso niños. Muchos de ellos no tienen acceso a atención médica en las 72 horas críticas necesarias para garantizar un tratamiento eficaz. A lo largo del año, continuamos defendiendo públicamente la necesidad de abrir rutas migratorias seguras y solicitamos a los gobiernos de la región que tomaran medidas para proteger a las personas que se desplazan.

 

Este artículo ofrece una visión general de nuestro trabajo en este país entre enero y diciembre de 2022; es un resumen que no puede considerarse exhaustivo. En 2022, contábamos con 13 profesionales* y gastamos 1,5 millón de euros en nuestras actividades médico-humanitarias. MSF trabajó en Panamá por primera vez en 2008, cuando abrió una oficina regional de respuesta a emergencias, que estuvo activa hasta 2013. Las primeras actividades humanitarias en el propio Panamá corresponden a 2021.

En 2022, MSF España era la única sección de MSF con actividades en el país. Si quieres conocer más en profundidad nuestro trabajo allí, consulta nuestro ‘Informe de Operaciones 2022’.

* La cifra de personal equivale al total de puestos a tiempo completo o FTE (del inglés full-time equivalent). Por ejemplo, dos personas a media jornada equivalen a un FTE.