Nos vemos obligados a cerrar el centro COVID-19 en Lesbos, en Grecia

El centro de aislamiento era el único lugar en Lesbos que proporciona un espacio seguro para que las personas de Moria con síntomas de coronavirus pudieran aislarse y recibir atención médica. Condenamos rotundamente las trabas de las autoridades locales.

MSF
31/07/2020

Médicos Sin Fronteras (MSF) nos hemos visto obligados a cerrar el centro de aislamiento de COVID-19 que había instalado en la isla griega de Lesbos, después de que las autoridades locales nos impusieran varias multas, con potenciales cargos penales, relacionadas con la normativa urbanística.

MSF condenamos rotundamente que las autoridades no hayan encontrado una solución para mantener abierto el centro de aislamiento cuando todavía existe el riesgo de que la COVID-19 se propague por el cercano centro de recepción de Moria, donde más de 15.000 refugiados viven hacinados y en condiciones insalubres. MSF advertimos que el cierre del centro de aislamiento, que reducirá significativamente la capacidad de respuesta de COVID-19 en la isla, podría tener consecuencias terribles en caso de que ocurra un brote en Moria.

“Estamos profundamente decepcionados. En medio de una pandemia como la actual, y a pesar de los esfuerzos de varios actores relevantes, las autoridades locales no han invalidado estas multas”, afirma Stephan Oberreit, nuestro coordinador general en Grecia. “El sistema de salud público en Lesbos no podría manejar la devastación que causaría un brote en Moria, y por eso intervinimos. Hoy hemos tenido que cerrar involuntariamente una parte crucial de la respuesta de COVID-19 para Moria”.

MSF obligada a cerrar su centro de COVID-19 en Lesbos

Nuestro centro de aislamiento de COVID-19 en Lesbos abrió sus puertas el 6 de mayo, como resultado de los esfuerzos de organizaciones médicas de toda la isla y con el apoyo de funcionarios públicos y del hospital local. El centro de aislamiento era el único lugar en Lesbos que brindaba un espacio seguro donde podían aislarse y recibir atención las personas de Moria que presentaban síntomas de COVID-19.

Desde el 1 de julio, las autoridades locales han impuesto varias multas y posibles cargos penales al centro de aislamiento relacionadas con regulaciones de planificación urbanística. Esto ocurre a pesar de que el centro era parte del plan de preparación de emergencias establecido por el Ministro de Migración y destinado a prevenir la propagación de la COVID-19 entre las personas que viven en el centro de recepción de Moria.

“Es increíble que las autoridades locales nos pongan tantos obstáculos por tratar de proteger a las personas vulnerables, cuando, justo a nuestro lado en Moria, vemos una enorme violación de la dignidad humana, con miles de personas atrapadas en condiciones inhumanas”, denuncia Oberreit.

Las 15.000 personas que actualmente se encuentran en Moria tienen poco espacio y un acceso limitado a agua y jabón, lo que hace imposible llevar a cabo las medidas preventivas como el distanciamiento físico y el lavado regular de manos. Más de 300 personas de alto riesgo, debido a su edad o condición médica crónica, así como a sus familias, permanecen atrapadas en estas peligrosas condiciones.

MSF pedimos, una vez más, la evacuación inmediata y urgente de todas las personas vulnerables, incluidas las de alto riesgo de contagio de COVID-19, desde Moria a un lugar más seguro.

MSF obligada a cerrar su centro de COVID-19 en Lesbos

“Esta no es la primera y probablemente no será la última vez que nosotros y otras organizaciones humanitarias debemos hacer frente a este tipo de trabas por tratar de cubrir las necesidades que descuidan las autoridades europeas y griegas en la asistencia a los migrantes y refugiados”, afirma Bertand Perrochet, nuestro director de Operaciones. “Durante los últimos cinco años, hemos visto el terrible daño que las políticas de contención infligen a las personas atrapadas en los centros de recepción en las islas griegas. Ahora, en medio de una pandemia, se nos ha impedido a responder a un riesgo de salud pública que las autoridades han desoído”.

Seguimos abiertos a discutir con las autoridades griegas qué se debe hacer con respecto al riesgo de COVID-19 para las personas en el centro de recepción de Moria, mientras mantenemos nuestros servicios de salud mental, sexual y reproductiva en nuestra clínica en Moria.