En Alepo, llegar al hospital es un desafío casi imposible de superar

Al menos cinco ambulancias han sido golpeadas por bombardeos el mes pasado. Ahora, solo once trabajan para una población de 250.000 personas.

MSF
13/10/2016

Los pocos hospitales que quedan en el este de Alepo (Siria) están sobrepasados por el número de heridos y, además, se enfrentan a otro desafío: llegar a las heridos durante los bombardeos. Solo 11 ambulancias trabajan para 250.000 personas.

Y es que ocho más están fuera de circulación porque necesitan reparaciones. “Los hospitales no solo han sido golpeados al menos 23 veces desde que en julio comenzó el asedio de la ciudad, sino que las ambulancias que transportan a los heridos también sufren los impactos de los ataques. Hoy, una clínica apoyada por MSF en el este de Alepo ha sido dañada por bombardeos,” afirma Carlos Francisco, nuestro coordinador general en Siria.

“Es un recordatorio de cómo, en Siria, las reglas de la guerra se continuamente", subraya.

86 pacientes al día

Entre el 23 de septiembre y el 8 de octubre, los hospitales en el este de Alepo recibieron 1.384 heridos, un promedio de 86 pacientes al día, según la Dirección de Salud.

Sin embargo, llegar hasta los heridos se está volviendo cada vez más difícil: tan solo existen ahora mismo 11 ambulancias en funcionamiento para una población de 250.000 personas.

El mes pasado, cinco ambulancias sufrieron los daños directos de las bombas y dos quedaron completamente destruidas.

Los conductores y paramédicos a cargo de la primera atención de emergencia también resultaron heridos durante los ataques, dos de ellos de gravedad, según informa la red de ambulancias local gestionado por la Dirección de Salud.

Golpean por partida doble

Las organizaciones médicas en Alepo avisan de que los bombardeos con ‘doble golpe’ suceden regularmente. “Una vez que los equipos de rescate llegan, los aviones de guerra golpean el mismo lugar otra vez, lo que provoca que haya más heridos y muertos, y que más ambulancias sean dañadas”, comenta Ahmad Sweid, director de la red de ambulancias.

“Estamos perdiendo personal capacitado y vehículos. Al mismo tiempo, el asedio evita que podamos traer los repuestos y reparar nuestras ambulancias”, comenta.

Además, los continuos e intensos bombardeos deterioran rápidamente las carreteras, forzando a los conductores a tomar desvíos constantemente.

“Una vez, estábamos tratando de rescatar a las personas de un edificio cuando nos vimos en medio de un segundo ataque”, explica Hasan Al Humsi, conductor de ambulancia que resultó herido en dicho incidente.

“Afortunadamente, nos fue bien. Nuestra voluntad y espíritu para realizar nuestro trabajo es lo que nos permite rescatar a mujeres y niños”, añade.

“Todo el mundo está siendo testigo del sufrimiento al este de Alepo, una población que está atrapada en una batalla sangrienta sin ninguna posibilidad de escape,” declara Pablo Marco, nuestro responsable de operaciones en Oriente Medio.

“Siria y Rusia deben detener ya el bombardeo indiscriminado sobre la ciudad. Todas las partes deben facilitar y permitir la evacuación de los enfermos y de los heridos de gravedad”, advierte.

El sistema de ambulancias gestionado por la Dirección de Salud del este de Alepo tiene un personal de 35 chóferes y responsables de primeros auxilios.

Los servicios más pequeños como realizar el transporte de emergencia de los heridos se gestionan gracias a voluntarios y ONGs.

 

Apoyamos a ocho hospitales en el este de Alepo. Además, gestionamos estructuras médicas en el norte de Siria y asistimos a más de 150 centros de salud y hospitales del país, muchos de ellos en zonas asediadas.