Yemen: los ataques y las amenazas nos obligan a cerrar nuestros proyectos en Ad Dali

Los pacientes, el personal y las instalaciones médicas que apoyamos en la zona han sufrido múltiples incidentes directamente contra ellos. Nunca pueden ser un objetivo: se debe garantizar su protección.

MSF
07/11/2018

Ha sido una decisión extremadamente difícil para nuestra organización pero, debido a los repetidos ataques y amenazas de violencia a nuestro personal de salud en Ad Dali, en el sur de Yemen, nos vemos obligados a cerrar nuestros proyectos de ayuda humanitaria en esta gobernación.

El cierre se debe a varios ataques y amenazas en nuestras mismas instalaciones médicas y, más recientemente, en nuestra propia residencia en la ciudad de Ad Dali.

“Las organizaciones humanitarias deben poder proporcionar, sin resultar amenazadas, una asistencia médica que resulta vital. Sin embargo, esto no se ha respetado en la ciudad de Ad Dali", afirma Ton Berg, nuestro coordinador general en Yemen.

“Pacientes, personal e instalaciones médicas que apoyamos en la zona han sufrido múltiples incidentes de seguridad dirigidos directamente contra ellas. Tras esta serie de sucesos graves, no nos queda otra alternativa que poner fin a todas nuestras actividades médicas y humanitarias en la gobernación de Ad Dali", asevera.

“En los últimos años hemos tenido que suspender actividades varias veces. El último ejemplo tuvo lugar en octubre pasado cuando la vivienda de nuestro personal en Ad Dali fue atacada dos veces en menos de una semana. A pesar de las suspensiones y de las negociaciones constantes con todos los actores, los incidentes de seguridad y las amenazas continúan en la ciudad de Ad Dali. Ante tales riesgos, no vemos ninguna posibilidad de brindar atención médica imparcial de calidad", añade Berg.

El cierre de las actividades incluye el fin del apoyo a las cuatro instalaciones médicas que recibían nuestras asistencia: el hospital Al Nasr, en la ciudad de Ad Dali, y los centros de atención primaria de Al Salaam, en Qatabá, Thee Jalal, en Al Azariq, y de Damt.

Éramos una de las escasas organizaciones médicas que proporcionaban asistencia humanitaria en la gobernación. Por ello, reconocemos el impacto que este cierre tendrá en materia de acceso a atención médica y que privará a miles de yemeníes de asistencia.

"Lamentamos profundamente haber llegado a este punto. Ha sido una decisión muy difícil para MSF, pero en estas circunstancias es inevitable para salvaguardar la seguridad de nuestro personal", explica Berg.

Estábamos presentes en Ad Dali desde 2012, donde apoyábamos la provisión de atención médica gratuita para los habitantes de los distritos de Ad Dali, Qatabá, Al Azariq y Damt. Desde entonces, nuestra labor había permitido a estas instalaciones de salud atender a más de 400.000 pacientes en toda la gobernación.

Mantenemos su compromiso de ayudar a la población yemení y seguimos brindando apoyo a más de una docena de hospitales y centros de salud en 11 gobernaciones del país.