Yemen: los ataques aéreos y el bloqueo reducen el acceso a la atención médica

Una semana más de violencia y un bloqueo que impide la entrada de suministros vitales al país demuestran el desprecio de las partes en conflicto hacia la población civil, las instalaciones médicas y los pacientes. La situación actual tiene un efecto devastador para los yemeníes y la misión médica.

MSF
07/12/2017

Los fuertes enfrentamientos en las calles y la reanudación de los ataques aéreos han paralizado Saná, la capital de Yemen, desde el 29 de noviembre. El resultado, la población civil atrapada en sus casas durante varios días y numerosos heridos sin acceso seguro a la atención médica.

Según informes que hemos podido recibir de la zona, los equipos médicos que están utilizando ambulancias para intentar rescatar a los heridos han sido objetivo de ataques. Además, se habla de cientos de personas asesinadas.

Aunque todavía no hemos recibido las garantías necesarias de todas las partes en conflicto para movernos dentro de Saná, sí hemos podido donar suministros médicos a los hospitales de la ciudad.

En los últimos días, los enfrentamientos se han extendido a otras partes del país como las gobernaciones de Hajja, Amran e Ibb.

En concreto, el pasado 2 de diciembre, recibimos a 28 heridos de guerra en nuestros dos hospitales en Khamer y Houth, en el noroeste del país.

Durante las primeras horas del 4 de diciembre, un ataque aéreo dañó el hospital Al Yumhuri, que apotamos en la ciudad de Hajja, causando daños en la sala de urgencias, el quirófano y la sala de cuidados intensivos, y la evacuación de 12 pacientes de la sala de urgencias. No obstante, a pesar de los daños, este hospital recibió a 22 víctimas de los ataques aéreos en Hajja poco tiempo después. Entre el 2 y el 3 de diciembre, también había recibido a 38 pacientes heridos de guerra.

“Durante este conflicto, los servicios médicos son atacados repetidamente. Y sin embargo, las partes en conflicto no están tomando las medidas necesarias para proteger las instalaciones médicas, poniendo en riesgo las vidas de los pacientes y del personal sanitario”, denuncia Steve Purbrick, nuestro coordinador en Hajjah. “La población debe poder huir o buscar atención médica, se debe permitir que las ambulancias lleguen hasta los heridos y los hospitales deben ser protegidos”.

Los enfrentamientos se desarrollan en un momento en el que Yemen aún se está recuperando de un bloqueo que paralizó las importaciones humanitarias y comerciales; impuesto por la coalición liderada por Arabia Saudí el 6 de noviembre. Aunque ahora algunos vuelos y barcos humanitarios han podido acceder al país, el bloqueo sigue en pie para importaciones comerciales como alimentos y combustibles.

Más presión para los civiles

Para la población yemení, esto ha supuesto una carga adicional significativa para el acceso a bienes básicos, medicinas y suministros médicos. Desde la escalada de los enfrentamientos y la imposición del bloqueo, los precios de los combustibles se han incrementado en un 200% y los precios de bienes esenciales cotidianos como el agua y los alimentos también han aumentado dramáticamente. En la ciudad de Saada, los precios de los alimentos aumentaron un 6% entre octubre y noviembre.

“El bloqueo y los enfrentamientos recientes han tenido un efecto devastador para la misión médica en Yemen,” declara Djoen Besselink, nuestro coordinador general. “El aumento del precio del combustible, por ejemplo, hace que las personas deban pagar más para trasladarse a los hospitales o que deban elegir entre ir al hospital o comprar comida para su familia. Los mismos hospitales están luchando para pagar el combustible que necesitan, lo que podría provocar el cierre de algunos de los pocos que aún siguen en funcionamiento.”

“La destrucción y el desmantelamiento de los servicios médicos de Yemen ha sido un distintivo del conflicto durante los últimos dos años y medio. El bloqueo está contribuyendo significativamente a esta situación y debe levantarse inmediatamente. Debe permitirse la entrada de los barcos y aviones comerciales a los puertos en el norte del país para evitar más sufrimiento innecesario”, concluye Basselink.

Trabajamos en 13 hospitales y centros médicos en Yemen, y apoyamos a más de 20 hospitales y centros médicos a lo largo de 12 gobernaciones del país: Taiz, Adén, Ad Dali, Saada, Amran, Hajja, Ibb, Saná, Hodaida, Abyan, Shabwa y Lahj. Con casi 1.600 trabajadores, nuestra intervención en Yemen es, en términos de personal, una de las mayores de nuestra organización en todo el mundo.