Libia: el tiempo se acaba para los 800 migrantes y refugiados detenidos en Zuwara

Cada día que pasa, la situación se deteriora aún más: en menos de un mes, más de 500 personas han sido detenidas. El centro de detención de Zuwara está tan superpoblado que las personas no pueden ni tumbarse.

MSF
04/05/2018

Estamos extremadamente preocupados por el porvenir de unos 800 refugiados y migrantes arrestados en un centro de detención peligrosamente superpoblado en la ciudad portuaria de Zuwara, a unos 100 kilómetros al oeste de Trípoli, la capital de Libia.  

Y es que algunos de los hombres, mujeres y niños llevan más de cinco meses detenidos en condiciones inhumanas, sin agua ni alimentos adecuados.

"La situación es crítica", explica Karline Kleijer, nuestra directora de emergencias. "Instamos enérgicamente a todas las agencias internacionales con presencia en Libia, a los representantes de los países de origen de los refugiados y migrantes, y a las autoridades libias a hacer todo lo posible para encontrar una solución urgente para estas personas".

El martes, el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) trasladó por vía aérea a 88 personas que necesitaban protección internacional fuera de Zuwara y las llevaron a un centro de detención en Trípoli, con el objetivo de identificar los casos más vulnerables que podrían ser potencialmente evacuados hacia el extranjero.

Las autoridades libias han trasladado a algunas personas a otros centros de detención en un intento de reducir el hacinamiento extremo, y la Organización Internacional para las Migraciones de las Naciones Unidas (OIM) comenzó el proceso de ‘retorno humanitario voluntario’ para algunos detenidos. Sin embargo, cientos de personas siguen dentro del centro de detención en Zuwara, y no hay ninguna solución a la vista.

Cada día que pasa, la situación se deteriora aún más, ya que aumenta el número de refugiados y migrantes detenidos arbitrariamente. Desde que comenzó la intervención de nuestro equipo de emergencias, el 18 de abril, más de 500 personas han sido detenidas en una instalación ya de por sí superpoblada.

Ahora mismo, el centro de detención de Zuwara está al cuádruple de su capacidad: el espacio es tan limitado que las personas apenas pueden tumbarse.

Además, y por si esto fuera poco, muchos refugiados, migrantes y solicitantes de asilo en Zuwara ya han soportado niveles alarmantes de violencia y explotación en tanto en Libia como durante sus terribles trayectos desde sus países de origen.

Algunos sufrían desnutrición cuando llegaron al centro, fruto de las durísimas condiciones de cautiverio que sufrieron a manos de las redes de traficantes locales.

“Una vez más, pedimos el fin a la detención arbitraria de refugiados, solicitantes de asilo y migrantes en Libia”, concluye Kleijer.