Nueve momentos clave de Médicos Sin Fronteras en 2022: así hemos trabajado

Desde la guerra en Ucrania hasta los primeros avances médicos en el mundo, en 2022 hemos trabajado duro para brindar atención médico-humanitaria vital. Todos los días, en todos los rincones del mundo, nos hemos esforzado por tratar a personas y poblaciones que atraviesan tanto emergencias como crisis humanitarias crónicas.

MSF
27/12/2022

Por Natalie Roberts, directora ejecutiva de MSF Reino Unido:

Desde la brutal guerra en Ucrania hasta la violencia implacable en Haití, el conflicto y la inseguridad han desbordado los sistemas de salud, obligado a las familias a abandonar sus hogares y afectado la salud mental de comunidades enteras. De hecho, en este momento, las personas que viven en situaciones de conflicto constituyen la mayor proporción de nuestros pacientes.

Al mismo tiempo, nuestros equipos médicos en todo el mundo han informado de aumentos generalizados de la desnutrición, una condición que, lamentablemente, afecta más a los niños y niñas pequeños. En Nigeria, Yemen y Somalia, hemos tratado a miles de pacientes jóvenes que luchan por la inseguridad alimentaria provocada por el conflicto, el clima y la economía.

Ya sea en una clínica rural remota o en un hospital urbano sobrepasado, nuestro personal ha trabajado para brindar esta ayuda médica vital. Hemos impulsado avances científicos en la atención médica humanitaria y usamos nuestra voz para hablar en nombre de los pacientes más vulnerables o excluidos de la atención.

Gracias al apoyo inquebrantable de personas como tú, podemos hacerlo de forma gratuita: ayudar a las personas independientemente de su raza, religión, etnia o política. Tú nos das esa independencia vital. He aquí nueve momentos clave de nuestro trabajo en 2022:

1. La crisis de Afganistán
Las consecuencias del cambio de gobierno de Afganistán en 2021 se convirtieron en una crisis crónica y compleja. El sistema de atención médica en todo el país ha sufrido presiones extremas, con escasez de personal, suministros y financiación. Al mismo tiempo, la situación económica y de seguridad ha provocado un aumento de la desnutrición y enfermedades prevenibles.

Durante todo este tiempo, hemos trabajado para satisfacer las enormes necesidades médicas de cinco importantes hospitales de todo el país. Esto incluye el Hospital Boost en Lashkar Gah -nuestro proyecto más activo en todo el mundo con más de 20.000 pacientes de urgencias cada mes- y el Hospital Jost, hogar de nuestra mayor maternidad, que atendió a más de 10.000 bebés en los primeros seis meses del año.

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2. La guerra en Ucrania
Desde los primeros días del conflicto en febrero, la guerra en Ucrania se ha convertido en la crisis humanitaria de más alto perfil en la memoria reciente. Los combates brutales ya veces indiscriminados han matado a miles de personas y han obligado a muchas más a huir de sus hogares: alrededor de 13 millones se han convertido en refugiados en los países vecinos y más de seis millones se han desplazado dentro de la propia Ucrania.

El impacto en la atención sanitaria ha sido inmenso. Los hospitales se han enfrentado a oleadas de pacientes con traumatismos, a una escasez dramática de suministros y a la amenaza de cortes de energía, mientras que los servicios esenciales, como la atención de enfermedades crónicas cotidianas, se han visto interrumpidos.

Lanzamos una respuesta rápida a las pocas horas de los primeros ataques. Desde entonces, nuestros equipos han estado llegando a hospitales de primera línea con suministros vitales, capacitando al personal ucraniano en respuesta a víctimas masivas, evacuando pacientes críticos en trenes medicalizamos y trabajando para ayudar a las personas mayores y más vulnerables que quedaron atrás.

Unidad de Cuidados Intensivos en el tren medicalizado de MSF en Ucrania


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3. La primera campaña mundial de vacunación contra la hepatitis E
Por primera vez en el mundo, nuestros equipos médicos en Sudán del Sur llevaron a cabo una campaña de vacunación masiva para detener un brote activo de hepatitis E. El virus puede matar hasta al 25% de las mujeres embarazadas que enferman, así como causar complicaciones peligrosas en el embarazo.

El proyecto, llevado a cabo por MSF y el Ministerio de Salud de Sudán del Sur, ha aparecido desde entonces en una influyente revista médica con la esperanza de que fomente acciones similares en todo el mundo.


Debora Nyabol Gai es una promotora de salud de MSF que ayuda a movilizar a los miembros de la comunidad del campo de desplazados internos de Bentiu para que se vacunen contra la hepatitis E.

4. El Ébola en Uganda
El 20 de septiembre, Uganda declaró oficialmente un brote de Ébola que hasta el momento había matado a 56 personas de 142 casos confirmados. Pero, si bien los brotes recientes de Ébola han contado con avances vitales, este último brote es causado por una cepa relativamente rara del virus para la que no existe una vacuna o tratamiento autorizado.

Con experiencia y conocimientos vitales en la lucha contra el Ébola, nuestros equipos se pusieron a trabajar apoyando a las autoridades de Uganda para limitar la propagación del virus, proteger a las comunidades en riesgo y brindar atención crítica en nuestros centros de tratamiento de Ébola.

Un higienista cuelga las botas para que se sequen tras ser descontaminadas por los higienistas del Centro de Tratamiento del Ébola de Mubende.

5. Las emergencias nutricionales
A lo largo de 2022, la desnutrición ha sido una preocupación creciente en las zonas de crisis humanitaria de todo el mundo. Ya sea debido a conflictos, clima o economía, en casi todos los casos han sido los niños y niñas menores de 5 años los que más han sufrido.

En Yemen, nuestros equipos trabajan para apoyar el paralizado sistema de salud del país e informaron de un aumento del 36% en los pacientes. En Nigeria, dimos la alarma sobre una situación catastrófica en el noroeste del país, donde ayudamos a tratar a más de 100.000 niños y niñas. Y, en este momento, nuestro personal médico en Somalia está trabajando día y noche frente a un posible desastre de desnutrición.



6. Las inundaciones en Pakistán
En Pakistán, lluvias monzónicas sin precedentes causaron inundaciones y destrucción generalizadas que afectaron a 33 millones de personas. Con más de un tercio del país bajo el agua, a fines de agosto el gobierno declaró el estado de emergencia y pidió una respuesta internacional.

Nuestros equipos, ya estaban presentes en todo Pakistán, trabajaron para adaptar los proyectos existentes y llegar a los supervivientes a medida que la situación evolucionaba. Hasta la fecha, nuestras clínicas móviles han atendido a más de 95.000 pacientes. También hemos proporcionado 44.000 kits de ayuda vital a familias y suministrado más de 46,5 millones de litros de agua potable limpia a comunidades vulnerables.



7. Más de 100.000 niños y niñas vacunados contra el sarampión

Somalia y Somalilandia se enfrentaron a una de las epidemias de sarampión más grandes del mundo, una emergencia que empeoró debido al desplazamiento masivo que obligó a las familias a vivir en campos abarrotados donde la enfermedad podría propagarse rápidamente.
 

Nuestros equipos en toda la región trataron en centros especializados a más de 7.000 pacientes, en su mayoría niños y niñas menores de 5 años. Posteriormente, en el mes de julio, nos asociamos con el Ministerio de Salud para llevar a cabo una gran campaña de vacunación que llegó a 106.000 niños y niñas, desde los campos hasta comunidades remotas y rurales.

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Un grupo de padres llevan a sus hijos a que sean vacunados contra el sarampión en Burao, Somalilandia.

8. En busca de un mejor tratamiento para la tuberculosis

A menudo considerada como una enfermedad del pasado, la tuberculosis (TB) es la principal causa de muerte infecciosa en el mundo. Cada año, más de 10 millones de personas desarrollan TB 'activa' y 1,5 millones mueren a causa de ella. Alrededor de la mitad de todos los pacientes desarrollan tuberculosis resistente a los medicamentos, una cepa que no responde a los antibióticos normales y puede requerir un tratamiento duro de dos años con efectos secundarios graves.

En 2022, un ensayo clínico que hemos dirigido, TB PRACTECAL, obtuvo resultados revolucionarios en favor de un tratamiento más corto, seguro y efectivo para pacientes resistentes a los medicamentos. Los hallazgos se publicaron recientemente en el New England Journal of Medicine y ahora han sido recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

9. La crisis climática

Las consecuencias humanitarias de la emergencia climática han sido claras en 2022. Desde las inundaciones destructivas en Pakistán y la sequía en Somalia, hasta el aumento de las tasas de malaria y dengue en todo el mundo, nuestros equipos han estado respondiendo a emergencias que empeoraron por un clima que cambia drásticamente.

Cuando Madagascar fue azotada por dos ciclones tropicales seguidos, trabajamos para llegar a las comunidades aisladas y reconstruimos los hospitales arrasados. También lanzamos nuestro primer proyecto en Kiribati, la remota nación insular del Pacífico denominada ‘canario en la mina de carbón’ del cambio climático. Y, en noviembre, pedimos una acción política concreta en la conferencia climática COP27 de la ONU en Egipto.

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