Sudán del Sur: condenamos el robo a mano armada en nuestra clínica en Pibor

El pasado 13 de julio, varios hombres armados entraron en nuestra clínica de Pibor, amenazaron con armas a nuestro equipo e hirieron a dos compañeros. Hemos retirado parte de nuestro personal hasta reevaluar la seguridad de la zona.

MSF
20/07/2017

Un robo a mano armada ocurrido en nuestra clínica en Pibor, en Sudán del Sur, el pasado 13 de julio, hirió a dos de nuestros compañeros y nos han obligado a reubicar a algunos miembros de nuestro personal.

El día el incidente, el jueves alrededor de la 1:30 de la madrugada, entre seis y diez hombres armados no identificados irrumpieron en nuestra clínica e hirieron a dos de nuestros compañeros tras amenazar con armas a varios miembros del equipo. Además, robaron material de oficina, incluidos teléfonos y ordenadores.

Debido a la violencia del ataque, hemos decidido retirar parciamente a nuestros equipos con el fin de reevaluar la situación de seguridad en Pibor, en el este de Sudán del Sur.

Condenamos con rotundidad y firmeza este incidente, que además sigue a uno previo ocurrido en febrero de 2016, cuando nuestra clínica fue saqueada. Nuestros equipos están sorprendidos por estos repetidos incidentes que dificultan seriamente nuestra capacidad de brindar asistencia médica de emergencia. Y es que en Pibor y otras zonas del país, los robos y saqueos son frecuentes.

En concreto, este ataque es el último de una serie de eventos ocurridos en estos seis años que nos obligan a reducir nuestras actividades durante varios periodos de tiempo, dejando a los pacientes con poco acceso a asistencia médica.

Trabajar con seguridad

“Somos la única organización que presta servicios médicos especializados muy necesarios, como cirugía básica, en la zona de Pibor", explica Fernando Galván, nuestro coordinador general en Sudán del Sur. "Este evento nos obligó a evacuar a parte de nuestro equipo y a reducir nuestras actividades en un momento en que la gente necesita desesperadamente atención médica".

La clínica en Pibor es un centro médico con 37 camas donde gestionamos el servicio de pacientes ambulatorios, la sala de hospitalización, la sala de maternidad y el laboratorio. Además, proporcionamos más de 6.300 consultas ambulatorias mensuales. En las últimas semanas, hemos visto cómo cada vez más pacientes acuden a nuestro centro con desnutrición aguda. Aquí, nuestros equipos han estado trabajando duro para brindar asistencia a las personas necesitadas, no solo en las instalaciones de Pibor, sino también en las unidades de atención primaria de Likonguele y Gumuruk. Ahora, con el inicio de la temporada de lluvias, la zona también se enfrenta a hora a un riesgo creciente de malaria.

Desde Médicos Sin Fronteras (MSF) reiteramos nuestro llamamiento  a todos las partes en conflicto para que respeten el derecho internacional que protege a los civiles, instalaciones médicas y la prestación de asistencia humanitaria. “Hacemos todo lo posible para proporcionar asistencia médica esencial a las personas que necesitan desesperadamente nuestra ayuda, pero necesitamos poder trabajar en un ambiente seguro. También necesitamos que nuestros pacientes se sientan seguros cuando vienen a la clínica. No deberían nunca tener que preocuparse por los ataques violentos que ocurren dentro de un centro médico. Los hospitales deben ser lugares seguros para los pacientes y para los trabajadores médicos que les proporcionan asistencia médica ", subraya.