Tras el paso del ciclón Chido el 14 de diciembre, nos movilizamos para evaluar las necesidades en el archipiélago y prestar ayuda de emergencia enviando equipos y material en cuanto las condiciones de acceso lo permitan.
Cinco días después del ciclón más intenso que ha azotado Mayotte en 90 años, las necesidades locales son colosales, especialmente en términos de acceso a alimentos, agua y saneamiento, electricidad, refugio y materiales de construcción, y atención primaria de salud. El restablecimiento de los medios de comunicación y las vías de circulación son también condiciones necesarias para el despliegue de los suministros de socorro.
“A pesar de la destrucción generalizada, el número de heridos graves registrados en Mayotte es relativamente bajo y parece que han podido llegar al hospital. Según nuestras primeras observaciones, el ciclón ha sido especialmente devastador en los barrios de chabolas, como Kaweni, el mayor del país, donde se hacinan unas 17.000 personas, y donde las viviendas son muy precarias. Los habitantes lo han perdido todo y ya están reconstruyendo sus casas, con sus propias manos, a veces sin zapatos ni protección. Así que ya podemos ver heridas con riesgo de infección. En general, está claro que las necesidades básicas son inmensas”, explica Yann Santin, nuestro coordinador de emergencias en Mayotte.
Tras catástrofes naturales de gran magnitud como esta, las principales necesidades que pueden encontrar las personas afectadas y que nuestros equipos están acostumbrados a cubrir están relacionadas con el restablecimiento del acceso al agua, la higiene y el saneamiento, el apoyo psicológico a las víctimas, el acceso a la atención primaria de salud, a través de clínicas móviles por ejemplo, y la prevención de enfermedades diarreicas -como el cólera, para el que ya existía riesgo de rebrote tras la epidemia de este verano-.
“Los habitantes de los barrios de chabolas destruidos ya vivían en condiciones muy precarias antes del ciclón. Ya sabemos que la respuesta del gobierno no podrá cubrir todas sus necesidades en el tiempo requerido. Estamos dispuestos a enviar un equipo ampliado para afinar nuestra evaluación de necesidades y proporcionar ayuda adicional”, explica Yann Santin.
La situación sanitaria en Mayotte ya era muy crítica antes de la llegada del ciclón Chido. Según el INSEE1, dos tercios de la población viven por debajo del umbral de la pobreza, un tercio de la población no tiene acceso al agua potable y hay grandes problemas de acceso a la atención sanitaria, sobre todo para los extranjeros que viven en la isla.
Entre mayo y septiembre de 2024, MSF prestamos asistencia en respuesta a una epidemia de cólera. Uno de nuestros equipos llevó a cabo talleres de promoción de la salud en los pueblos de Kaweni, Passamainty, Vahibé y Mirereni, así como iniciativas para mejorar el acceso al agua, el saneamiento y la higiene.
1 El Instituto nacional de la estadística y los estudios económicos recopila, elabora, analiza y difunde información sobre la economía y la sociedad francesas.