Cuando un grupo humano es golpeado por la guerra, la violencia o la inestabilidad social, o el país en el que vive es frágil debido a la falta de recursos, la falta de acceso a los servicios de salud se convierte en algo generalizado: esto significa que muchas personas no podrán ir al médico cuando lo necesiten, por muy grave que sea su estado. La atención que proporcionan nuestros equipos intenta cubrir las necesidades más urgentes, tanto en los diferentes niveles de la atención médica (desde la primaria a la hospitalaria, pasando por la comunitaria) como a través de actividades de gran impacto en la salud, como las relacionadas con el agua y el saneamiento.
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Estalla de nuevo el conflicto en la frontera entre Kirguistán y Tayikistán
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Los retrasos en el suministro de la prueba de la tuberculosis costarán vidas
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Seis meses de guerra en Ucrania: “Nos estamos recuperando, pero no podemos olvidar lo que pasamos”
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Retrocesos en la lucha contra el VIH, la tuberculosis y la malaria
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Acceso a la atención en salud mental: un derecho de todos, un privilegio de unos pocos
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Más allá de la última salida
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Salud por Derecho, Médicos Sin Fronteras y CESIDA pedimos al Gobierno una aportación de 180 millones al Fondo Mundial de lucha contra el sida, la tuberculosis y la malaria
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En el norte de Honduras, las mujeres son excluidas por las graves limitaciones de acceso a salud sexual y reproductiva
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La huida forzosa, una herida abierta
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La detención priva de la libertad, de la dignidad, de la vida: “Piensan que no somos humanos”
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Huyendo de una nueva ola de violencia en el norte de Mozambique